Iconográficamente, el recurso de los animales con cabezas de otros animales y, específicamente, el de los seres humanos zoocéfalos ha estado presente en las culturas desde tiempos remotos. Los historiadores del arte y los antropólogos han dado buena cuenta de ello y como bien sabéis los humanos zoocéfalos (o animales con cuerpo antropomorfo, para quien prefiera otro punto de vista tal vez más preciso) han sido objeto de observación a través de las obras de diversos autores anteriormente comentados en este blog. Atañen también a viejas cuestiones relacionadas con la nalogía, la semejanza y el parecido.
"Bestiario"-Francesco Sambo |
Matthew Grabelsky |
Lo que más nos llama la atención de la publicitación de la cabeza de gato realista que han confeccionado los estudiantes protagonistas de la noticia que comentamos hoy es que ofrece la posibilidad de aparentar in situ, en la propia escena fotográfica, uno de los fotomontajes zoocéfalos a los que hacíamos referencia.
Yago Partal |
Christoph Meyer |
Ulric Collette |
Miguel Vallinas |
La cabeza de gato de peluche no es una forma sofisticada de festivo cabezudo, sino la escenificación tridimensional de un procedimiento digital, reforzada por el hecho de ser divulgada a través de lared en forma del mismo mapa de bits que constituiría el mismo resultado mediante el uso de Photoshop. Tal vez estos estudiantes no pretendieran más que ilustrar de forma ostentosa, como un alarde, las posibilidades técnicas y expresivas de los tejidos y la confección textil como escultura hiperrealista (los peluches naturalistas hace tiempo que merecerían una mención específica en nuestro glosario temático). Sin embargo, tanto si está tras sus premisas como si no, el hecho es que con su cabeza de gato y las imágenes con las que la muestran han señalado una brecha, una ambigüedad entre el contenido icónico de una imagen y la información precisa que registra, un síndrome que afecta prácticamente a todo el contenido icnográfico de origen fotográfico en la era digital.
Las imágenes y las referencias al trabajo en cuestión lo extraemos de un artículo de Cultura Inquieta del que os facilitamos el enlace al final de este post.
NOS CONVERTIMOS EN GATOS CON LA CABEZA QUE HAN DISEÑADO ESTOS ESTUDIANTES JAPONESES
Estudiantes en el arte de la costura del fieltro en Japón han creado esta cabeza de gato portátil, que es tan realista que parece que ha sido insertada con Photoshop en estas fotos. Es realmente impresionante, pero hay algo en ese realismo combinado con su enorme tamaño que la hace, sin duda, desconcertante.
Esta cabeza de gato espeluznantemente realista fue hecha con fieltro de lana de oveja, por el maestro Housetu Sato y sus alumnos de la Escuela Japonesa de Arte con Lana (nihonyoumoua-togakuen). Es la única escuela en el mundo que puede presumir de contar con un curso especializado en la fabricación de gatos, en el que los estudiantes aprenden el arte de crear, de forma realista, gatos con aguja y fieltro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario